Este espacio fue creado hace ya hartos años y su último capítulo, curiosamente, se llamó "El final", relato que marcó un antes y un después en mi forma de ver y de hacer las cosas.
En un comienzo que me motivó la idea de plasmar mis ideas y reflexiones en una etapa de mucha censura por parte de mis pares (con una formación cristiana bastante araigada) por mis pensamientos casi radicalmente opuestos a la mayoría. No fue fácil. Hoy no pienso muy distinto, pero tengo mucha más claridad respecto de algunos asuntos. Y mucho menos miedo.
Avanzado el tiempo, comencé a vivir una etapa muy reflexiva que me llevó a disfrazar de personajes y aventuras algunos episodios claves de mi vida. De ahí nacieron varios textos, algunos de los cuales están publicados aquí.
¿Y hoy? Hoy he rescatado este espacio abandonado y pretendo transformarlo en un lugar para todo lo anterior. ¿La diferencia? La diferencia es que ya no tengo miedo al qué irán a pensar ni a las antiguas amenazas de un paseo al infierno sin regreso. He madurado un poco. Mis entes censuradores también, supongo.
